Proteus

Brian era el hijo de la Doctora Moira McTaggert, del cual se ignora prácticamente todo su pasado hasta que manifestó sus poderes mutantes, tan poderosos que su madre decidió confinarlo en una celda especial en las instalaciones de investigación de la Isla Muir, en Escocia. Tras escapar, Brian, ahora apodado Proteus, viajó de cuerpo en cuerpo agotando la energía vital de sus huéspedes a los que consumía la vida hasta llegar a la ciudad de Edimburgo, siendo perseguido por la Patrulla X que intentaba detenerlo. Pese a que Moira les advirtió que el punto débil de su hijo era el metal, ninguno de los miembros de la Patrulla X tenía los medios para herirlo por lo que quedaron a merced de los poderes para manipular la realidad de Proteus que los derrotó facilmente, llegando a poseer a la mas poderosa de ellos, Fénix.

La posesión por parte de Proteus de alguien tan poderoso llamó la atención de gente ajena en la batalla, en la Unión Soviética los altos mandos vieron que una amenaza así podría poner en peligro su país por lo que enviaron a los Super Soldados Soviéticos, con Coloso al mando, para que detuvieran a Proteus. Los héroes rusos lograron poner contra las cuerdas a Proteus hasta el punto que uno de ellos iba a rematarlo pero entonces apareció Charles Xavier, proveniente del espacio y atraído también por la posesión de Fenix que detuvo a Proteus y al ruso con sus poderes mentales ya que sabía que si bien matar a Proteus significaba poner fin a la amenaza, también significaba la muerte de Jean, algo que no estaba dispuesto a permitir.

Tras urdir un plan junto a Coloso, Xavier ofreció a Proteus un cambio, que abandonara el cuerpo de Fenix y ocupara el suyo propio. Proteus, que había sentido de primera mano el inmenso poder psiónico de Xavier, aceptó y abandonó a Jean para poseer al Profesor. Comenzó entonces una lucha psiónica entre Proteus y Xavier que intentaba contener a Brian, a fin de que Coloso en su forma acorazada atacara a Proteus pero el villano vio el peligro y esquivó el golpe, amputando el brazo de Rasputin. Pero el joven ruso no desfalleció, sino que usando su brazo cercenado como ariete, empaló a Proteus matándolo.