Darkhold: Pages from the Book of Sins

Morty Thurnton agradece al enano su ayuda con el encendedor y empieza a disculparse, pero el Enano lo tranquiliza y le entrega una carta dirigida para él. Morty la coge y le dice que no puede leer chino, pero el Enano lo insta a leerla y empieza a recitar Enamorath, Emmoreth, Ba'al Set Elianath y el fuego lo cubre todo. Dos horas más tarde los Darkholders han acorralado a Victoria, Sam y Louise en la biblioteca que ahora está ardiendo. Protegiéndose con una cortina, Sam saca a Louise de allí y se repliegan. Los Darkholders deciden dejar que las llamas hagan su trabajo y matar a los bomberos que intenten apagar el fuego, pero Modred los intercepta y los calcina. En la biblioteca Victoria ha encontrado la página del Darkhold. Louise la lee y se da cuenta que es un conjuro de búsqueda que usa un mastín infernal. De hecho allí está la bestia. Usando sus conocimientos ocultos Louise logra controlar a la criatura haciéndole entender que ahora ellos gobiernan la página. Gracias a ella planean encontrar a Thurnton, ya que Sam ha llegado a la conclusión que el fuego solo puede ser obra suya. Al salir los bomberos están apagando el fuego y los cuerpos de los Darkholders presentan graves quemaduras. Gracias al mastín llegan hasta la mansión del General Hamilton, quien los acoge en su interior. El militar retirado los recibe y les presenta a Sherman, su perro pastor, que recula ante los gruñidos del mastín infernal y tiene una oreja herida. Tras despedirse Sam investiga a Hamilton y descubren que trabajó en las operaciones relacionadas con Gammatown. Al parecer el General tiene en su poder una bomba gamma que supuestamente fue desmantelada. El trío entra en la mansión Hamilton, pero un láser de seguridad alcanza la mastín infernal y lo dan por muerto. De nuevo en el interior de la casa del general lo obligan a confesar los planes de Thurnton para hacer estallar una bomba en la ciudad. La bomba está siendo colocada en el almacén Adams-Morgan. Victoria y Louise van hacia allí mientras Sam se queda con el general. Este le confiesa que ayuda a Thurnton para obligar al país a fortalecerse ya que el atentado será achacado a cualquier grupo terrorista de Irak o Trans-Sabal. Sam sabe que el General tiene en su poder dos bombas más y decide matarlo para que no pueda volver a intentar algo así. Mientras en el almacén Victoria y Louise entran en él, pero son descubiertas. Afortunadamente Victoria puede distraer lo suficiente a los guardias para que Louise entre en una armadura Mandroide. Mientras la mujer se hace cargo de los guardias, Victoria encuentra la bomba, pero Thurnton dispara contra ella con una pistola eléctrica. Una de las descargas alcanza el temporizador de la bomba que se vuelve loco. Las mujeres obligan a Thurnton a desmantelar la bomba. Quedan dos cables expuestos y no sabe si hay que cortar el azul o el rojo. Sam llega y dice el azul, así que Victoria lo corta, pero Sam no tenía ni idea y ha dicho uno al azar. Aprovechando la confusión de las mujeres por lo ocurrido, Thurnton intenta escapar con la hoja del Darkhold, pero al verse acorralado se la traga. En ese preciso momento llega en mastín que quiere acceder a la hoja como sea y destripa a Thurnton. Acto seguido la criatura infernal se deshace. En esas llega Mordred y se presenta al grupo.

El Enano hace autostop hasta Perfection, un pequeño pueblo de 1051 habitantes de Carolina del Sur. El hombre que lo ha llevado hasta allí le pregunta si va a un carnaval o algo por el estilo, pero el Enano le responde que se va a la oficina del censo, la población del pueblo necesita un reajuste.