Cuatro contra la marea
A 26
Hank Pym y la Avispa observan desde su barco cómo Namor se dirige a Nueva York, y Hank le dice a Jan que sólo ella puede avisar a la ciudad a tiempo. La Avispa parte del barco volando, pero pronto necesita flotar un rato en el mar para descansar. Entonces es capturada por una nave atlante gobernada por Attuma. Éste, que no la reconoce, le dice que va a ser testigo de cómo su Incrementador de Mareas destruye la costa este americana. Cuando se encuentra a solas, la Avispa escapa de su celda y envía un mensaje de advertencia a los Vengadores.
El Capitán América enseña a los otros Vengadores las nuevas medidas de seguridad que ha instalado Tony Stark en la Mansión. Como siempre, Ojo de Halcón se burla del Capi, antes de salir a dar una vuelta. Entonces, los Vengadores reciben una llamada de la Avispa que les dice que Attuma se dispone a atacar la ciudad. Antes de partir, el Capi trata de localizar a Ojo de Halcón, pero éste no se ha dado cuenta de que se le ha caído su anillo localizador. Así pues, los tres vengadores parten sin Ojo de Halcón, después de dejarle un mensaje.
Los Vengadores llegan a donde les indicó la Avispa. Entonces, su nave es capturada por unas enormes tenazas que surgen del mar, y es conducida a la nave de Attuma. Allí, los Vengadores combaten a Attuma y a sus hombres, pero se encuentran en inferioridad de condiciones al tener que combatir bajo el agua. Los hombres de Attuma se dan cuenta de que la Avispa ha escapado, pero ésta no aparece por ningún lado.
Ojo de Halcón llega a la Mansión y ve que los demás se han ido. Como no consigue acordarse de la clave para acceder a los mensajes, por si le han dejado alguno, se conecta a una máquina para mejorar su memoria. Mientras se encuentra conectado a la máquina, no se percata de que hay alguien más en la Mansión.