Storm vol 3

Tormenta se toma una ducha para quitarse la suciedad y limpiarse las heridas, pero ni aún así se siente completamente limpia. Yukio viene a recogerla para acompañarla al aeropuerto, pero Ororo está enfadada con ella por haberla obligado a participar en la lucha y especialmente por haber aprovechado para matar a sus espaldas a la líder del clan Oaklands y apenas le dirige la palabra en todo el trayecto. Ya en el avión, una mujer la reconoce y le agradece lo que ha hecho por Santo Marco. Ella es de Filipinas y sabe perfectamente lo que es tener que sufrir huracanes. La mujer trabaja transportando el riñón de una tía a su nuera para un transplante de órganos. Otra mujer de mayor edad sin embargo tiene reparos en viajar a bordo del mismo avión que una mutante y considera que la pone en riesgo, pero el capitán zanja el asunto invitando a la mujer que protesta a bajar del avión si no quiere viajar en él. También forma parte de los pasajeros un senador. En medio del vuelo atraviesan una tormenta, así que Ororo usa sus poderes para despejar el tiempo al paso del aeroplano cosa que la mujer que inicialmente había protestado le agradece. De pronto el avión sufre un ataque de unos hombres alados con armadura. Los guardaespaldas del senador creen que la culpable es Tormenta, pero la mujer les asegura que no tiene nada que ver. El ataque se reanuda y uno de los guaridas golpea a Tormenta en la pierna herida. Involuntariamente lanza un rayo que destruye los sistemas electrónicos del aparato. Tormenta derriba la puerta y evita que se produzca un cambio de presión brusco con sus poderes. Ya en el aire descubre que el aparato ha sido dañado por los atacantes y tiene que hacerles frente a la par que sostiene el avión. Los mercenarios sufren un ataque directo, pero Ororo se ve obligada a concentrar todos sus esfuerzos en el avión y dejar que escapen para evitar que se estrelle.

Con gran esfuerzo, Tormenta consigue llevar el avión hasta Nueva York sosteniéndolo únicamente con sus poderes climáticos, ya que la vida de la receptora del riñón depende de ello. Agotada a penas se tiende en pie cuando llegan, pero pide a los servicios de urgencia que atiendan antes a la enfermera filipina que lleva el órgano. El capitán le agradece que los haya salvado pero el senador denuncia a Tormenta ante la policía de haber sido ella quien ha provocado el incidente. La policía la arresta y ella se desmaya en los brazos del piloto.