Protector Letal
VENOM 158
Al ver la multitud de ratas, Hendo y varios otros hombres dinosaurio se avanzan sobre ellas sin preguntarse de donde han venido. Tana intenta convencerlos de que algo raro ocurre, pero es demasiado tarde y Kraven salta sobre Hendo atravesándolo con su lanza. Tana salta sobre Kraven, pero el Cazador le dispara con una bala red y la captura. Los policías le dicen que no les han ordenado matar a nadie, pero Kraven les hace caso omiso y los deja a cargo de la prisionera mientras él prosigue la cacería. Tana rompe la red y huye por los túneles. No tarda en encontrar a Veneno atrapado bajo los cimientos del edificio que derribó Grito. El simbiote está en mal estado y él apenas se tiende en pie. Tan solo aguantará unas horas, así que pide a Tana que vaya en busca de ayuda. La mujer no tarda en regresar acompañada de un gran número de topoides y criaturas subterráneas que ayudan a apuntalar los cimientos evitando así que el edificio colapse del todo. Eddie pide a Tana que vaya a su casa. Veneno localiza a Kraven y Grito y se enfrenta a ellos. Gracias a su estado de furia logra sobreponerse al ataque sónico de Grito y los derriba a los dos. Cuando está a punto de matar a Kraven, Tana le inyecta las medicinas de Alchemax que ha ido a buscar a su casa y Eddie cae al suelo inconsciente. La policía llega y Tana se encara a ellos preguntándoles por qué querían matarlos. Los agentes aseguran que esa no era su intención y que tan sólo pretendían que dejaran de comerse a universitarios. Tana les asegura que nunca han hecho daño a nadie, no como Kraven. Tana les entrega a Grito y Kraven, pero no deja que los policías se lleven a Eddie. A regañadientes, los agentes se marchan. Veneno agradece a Tana su ayuda, aunque teme que no podrán vivir en paz y los policías regresaran. Tana le recuerda que los topoides llevan viviendo aquí sin que nadie los moleste y ofrece a Veneno un refugio si alguna vez lo necesita.
Lugar: Tribunal Supremo, Manhattan, Nueva York
Personajes: N/A
El abogado de Price defiende el caso de su cliente ante la jueza alegando que fue controlado mentalmente por el simbionte. Recuerda que es un militar condecorado sin antecedentes penales y le hace ver que el tener a alguien encarcelado sin haberse podido defender de la justicia de forma igualitaria a otras personas con más medios puede resultar una mala imagen para la ciudad.
Lugar: Instalaciones Correccionales de Supermáxima Seguridad para Encarcelamiento de Superhumanos, Estado de Nueva York
Personajes: Price, Lee
Al día siguiente, Price es puesto en libertad. El guardia que le abre la puerta le dice que no se meta en líos a lo que responde que no es él quien tiene que preocuparse por los líos.